MÁS DE 300.000 € PARA LA P.A.H. DE ADA COLAU

Ada Colau, aquí ya ha terminado.

 Busque otro colectivo en crisis



"Otras tierras del mundo reclaman el concurso de mis modestos esfuerzos". Así se despidió Che Guevara cuando lo echaron de Cuba. ¿Por qué no toma esta señora su ejemplo y se larga a otras tierras allende los mares para predicar la revolución?. Aquí, salvo a cuatro grupos residuales su mensaje ya no sirve.

 No parece haber convencido a la activista Ada Colau y a su ejército de desahuciados sin hipoteca el resultado final de su ILP convertida por el PP en la “Ley de Protección de los deudores hipotecarios, de reestructuración de las deudas hipotecarias y de alquiler social”. Imagino que sí estará satisfecha con los más de 300.000 € que se han embolsado en concepto de gastos por la recogida de firmas.

La Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que la Plataforma de afectados por la Hipoteca (PAH) presentó en el Congreso con un total de 1.402.854 firmas, le concedía el derecho al tiempo que la obligación a la Cámara de ser tramitada como proyecto de ley y esto es lo que se ha hecho. Otra cosa es que la PAH pretendiera que al creerse los depositarios de la justicia y la razón, la nueva ley coincidiera con sus postulados. Afortunadamente el sistema aunque enfermo aún goza de la fortaleza necesaria para hacer las cosas con arreglo a derecho y ha puesto en su sitio a quienes pretendían mediante firmas y algaradas sustraer al Congreso su capacidad de legislar o forzarle a aceptar lo inaceptable. Las firmas presentadas por la PAH son bastantes menos que los votos conseguidos por sus más allegados, IU por ejemplo y a años luz de los casi once millones obtenidos por el PP, aún así pretendían doblegar la voluntad popular con métodos importados de las repúblicas bananeras de Sudamérica y el numeroso colectivo de activistas, igualmente importados de ellas, cabecillas de la demagogia asamblearia.

Un discurso perfectamente desmontable. Pura demagogia y utopía

El discurso vendido por Ada Colau y sus seguidores es perfectamente desmontable porque por encima de todo es un discurso demagógico encaminado a excitar los ánimos de las masas y crear falsas expectativas a los que realmente sufren los problemas. Su estandarte, la dación en pago y además con carácter retroactivo, una utopía que no encaja en nuestra legislación hipotecaria tal y como ellos la contemplan. No hacen distinción entre desahucio, desalojo de un inquilino o lanzamiento, desalojo posterior a la ejecución de hipoteca. Incluyen en el término desahucio todo los que es susceptible de lanzamiento, meten en el mismo saco a inquilinos desalojados por impago y a lanzamientos de primeras y segundas viviendas, garajes, trasteros, locales comerciales.

El número de ejecuciones hipotecarias propuestas (datos del CGPJ) entre 2008 y 2012 ascendió a 415.117, de las cuales unas 253.000 terminaron en lanzamiento. Solo un 10% de esos lanzamientos correspondía a primeras viviendas para domicilio habitual; el resto eran locales, garajes, naves industriales, promociones de viviendas terminadas o a medias de construir. La media estadística de ejecuciones hipotecarias con lanzamiento de vivienda habitual nos da una cifra de 13,7 diarias en ese periodo, muy lejos de una cada cuarto de hora como pretende hacer creer la PAH.

Otro argumento demagógico utilizado por Ada Colau y sus seguidores en el del número de suicidios habidos, supuestamente por esta causa, en los últimos años. Otra gran mentira ya que éstos han descendido notablemente desde 1995, situándose por debajo de la media europea y sin llegar a considerar el suicidio por causa de la vivienda como dato estadístico de relevancia.



Cayo Lara y toda esta tropa quieren volver a la banca pública
 de las Cajas de Ahorro, que han arruinado a españa



La morosidad en el sistema también da al traste con las especulaciones de la PAH. El año 2012 acabó con índice de morosidad bancaria del 10,8 % del que tan solo el 3,84% corresponde a impagos del sistema hipotecario, es decir, por cada 100 € de deuda solamente 3,84 € resultan impagados y en estos se engloban los que corresponden también a hipotecas de garajes, locales, naves industriales y promociones de viviendas sin vender, es decir que el porcentaje de impagos en préstamos hipotecarios para vivienda habitual es mínimo.

El Congreso ha tramitado la ILP con arreglo a la norma y al final hay un Proyecto de Ley, aprobado por la Comisión de Economía y pendiente de tramitación en el Senado, que recoge los deseos de la mayoría parlamentaria como reconocen las leyes. El Gobierno es consciente de las dificultades que atraviesan las familias que no disponen de ingresos para atender el pago de las obligaciones de su vivienda y ha puesto los medios para buscarles una solución hasta que la situación mejore, sin perjudicar a los acreedores legales. Es posible que el Gobierno se haya quedado corto, que no haya acabado con los abusos bancarios, que no haya cedido a determinadas pretensiones de los grupos parlamentarios y que, como dicen, haya aplicado el rodillo pero también es cierto que la oposición ha actuado sin sentido de Estado y solo pensando en el corto plazo que media hasta las próximas elecciones, donde unos esperan ver colmadas sus aspiraciones independentistas y otros piensan en volver al poder para seguir escondiendo sus vergüenzas.



El Proyecto de Ley ya está en el Senado. El Gobierno ha
cumplido excrupulosamente con el mandato de la ILP



Las pretensiones de Ada Colau y sus seguidores ya fueron rechazadas en numerosas ocasiones por el Gobierno socialista de Zapatero. Él mismo dijo que era una aberración desestabilizar el sistema financiero; su ministro Caamaño se mostró contrario a las reformas hipotecarias y a la dación en pago y su ministra Chacón promovió la ley de desahucio exprés y la creación de Juzgados para agilizarlos. Los catalanes de CIU están condicionados por una situación interna que les impide votar a favor de cualquier propuesta del Gobierno y los comunistas de la Izquierda Plural no iban a ser menos y más cuando su delfina andaluza Elena Cortés acaba de engendrar una ley que sin duda alguna será abortada por el TC y que pretende, como si esto fuera Cuba, Bolivia o Venezuela, quitar a unos (los contrarios) para dárselo a otros (los suyos). Ya solo le faltaba pedir a la banca una quita general para todas las hipotecas, como si la banca fuera la única beneficiaria del boom del ladrillo y las hipotecas. ¿Por qué no pide una devolución a los Ayuntamientos, propietarios de suelo, promotores, constructores, vendedores, notarios, registradores y todos los que se forraron a costa del sudor de los que aspiraban a tener una vivienda digna? ¡Ay Andalucía!, la cueva de Alí Babá donde se roba a los pobres en paro para dárselo a gandules de partido que no han dado golpe en su vida.

Zapatero, el máximo culpable de lo que ahora está pasando

Podemos sacar de todo este embrollo tres conclusiones, una de tipo económico y social y otras de tipo político. Como primera y si hacemos balance retrospectivo, venimos de una época en donde la bonanza económica, la estabilidad de empleo y los bajos tipos de interés, movieron a muchos españoles a pensar que con un poco más de lo que pagaban en alquiler podían convertirse en dueños de su propia vivienda. Llegaron las “vacas flacas” en gran parte por la mala gestión del peor Gobierno de la democracia, el Gobierno socialista de Zapatero y ahora, con casi seis millones de parados hay muchas familias que no pueden hacer frente a los compromisos contraídos y la rigidez de algunas leyes están causando estragos en las mismas. Tras una iniciativa popular tramitada en el Congreso, el Gobierno ha elaborado una ley, ahora en periodo de debate, que viene a suavizar si no a corregir algunas situaciones extremas que provocan alarma social.

Los defensores de la democracia asamblearia y la república bananera

Como segunda y a la vista de cómo se vienen desarrollando los acontecimientos, lo que se ve es que hay un buen número de españoles a los que se les llena la boca de democracia y no saben lo que es y para lo que sirve. La izquierda desalojada de sus poltronas no ha sabido digerir la nueva situación y procura, como ya hiciera muchos años antes, conseguir por métodos revolucionarios lo que las urnas les negaron democráticamente. Todo vale si es contra la derecha y les ha venido muy bien el nacimiento de movimientos ciudadanos en un abanico que comprende desde estalinistas hasta fascistas pero totalitarios y antidemócratas la mayoría para, fomentándolos y apoyándose en ellos, ir minando los cimientos del poder legalmente constituido. El acoso a los políticos del Partido Popular, sin haberlo habido antes y en peor situación a los políticos del PSOE, me traslada al pacto del PNV con ETA para hacer la vista gorda ante la caída de los demás a cambio de no tocar a sus miembros y lo traslado al que ha hecho la izquierda con todos estos grupúsculos a los que defiende y ayuda a condición de que hagan la vida imposible a sus enemigos (ellos no reconocen la palabra adversario) del PP, en las Instituciones, en la calle y hasta en sus casas. Los que se proclaman defensores de los derechos humanos pisoteándolos cuando conviene a sus intereses personales y de clase.

Mariano, como no le echas mas ... al asunto, estamos arreglados.

La tercera y con ésta termino, no es otra que comprobar con tristeza como ni Rajoy ni su Gobierno tienen el coraje suficiente apara atajar esta situación que está destrozando lo que tanto ha costado levantar. Rajoy ha perdido la batalla de la información, ha perdido la batalla de la calle; la forma de actuar le hace perder también la razón de sus actos. Su debilidad es tan preocupante que el desencanto está llegando a muchos de los que le votamos. Rajoy debe dar un golpe de timón, hacerse con la situación, poner a los perroflautas en su sitio, aclarar de una vez los escándalos que le afectan, acabar con el acoso a personas e Instituciones, salvaguardar la unidad de España y la Corona, cortar de una vez con los separatistas aplicando simplemente las leyes y para todo esto, pasar menos tiempo cobijado bajo las faldas de Ángela Merkel. ¿De qué nos sirve dedicar todo nuestro esfuerzo a solucionar la crisis económica si con ello estamos provocando una crisis social e institucional que puede dar al traste con lo que hoy conocemos como España?

Paco del Hoyo "Opinión, El Pueblo de Albacete" 21/04/2013