RESPONDIENDO A UN PRETENCIOSO
De cuando en cuando echo un
vistazo a la prensa digital albaceteña, en la mayoría de los casos sectaria
donde las haya, imbuida por un sentimiento contrario a todo lo que suene a PP y
a Cospedal, repetitiva, malintencionada, negativa, crítica sin dar cuartel y
exclusiva de unos pocos, afines a la causa de la izquierda demagógica, en la
que no cabe la variedad de opiniones a no ser a través de los filtrados
comentarios.
Hoy en "Albacete Cuenta" me he encontrado con un
artículo escrito por Miguel Ventayol , que
califica como “imagen sociológica en febrero de 2015” y titula “Una mañana
cualquiera en el Centro de Salud”. Publica una gran foto del Centro de Salud de
la zona 8 que está situado a la espalda del Corte Inglés.
Centro de Salud de la zona 8 (trás el Corte Inglés) |
No sé si Ventayol visitó realmente el Centro de Salud, más bien pienso que no porque lo relatado podía haberlo escrito tomando un café en el bar de enfrente sin necesidad de exponerse a salir contagiado por la gripe. Después de leerlo un par de veces a acotar algunos párrafos lo que saco en conclusión es que el artículo no tiene otro objetivo que el de echar mierda sobre la gestión sanitaria del Gobierno de Cospedal, en este caso haciendo hincapié en la aglomeración de pacientes y en la demora en ser atendidos.
“La gente se
apretuja en los pasillos, no hay asientos para todos”. “Pasan los minutos, los
diez minutos y los cuartos… al médico se va con paciencia y con algún
entretenimiento” y termina “Los pasillos siguen abarrotados”.
Antes de
rebatir los planteamientos de Ventayol quiero dejar claro que he sido muy
crítico con los recortes del Gobierno de Cospedal, sobre todo con la pretensión
del Consejero Echániz de eliminar las urgencias en Centros de Salud del medio
rural. No obstante pienso que se trata de una cuestión política para la cual
existe el veredicto de las urnas. Pero lo que sí tengo claro es que el personal
facultativo y administrativo de los Centros en general no han caído en el
desánimo a la hora de cumplir con su obligación, más que nada porque se trata
de una profesión a la que la gente no llega por casualidad sino por vocación y
ese es su mejor signo de identidad.
El Centro de
Salud de la zona 8 tiene fama de ser uno de los mejores de Albacete y yo
personalmente doy fe de que así es. En este Centro se comienza con una atención
exquisita del personal administrativo que atiende a los pacientes en citas,
recetas, documentos, preguntas y cualquier otra necesidad que pudieran
plantearles.
Si acudimos
a la consulta del médico o el enfermero, previamente habremos conseguido la
cita a través de internet o llamando por teléfono, con lo cual ya tenemos
concertada una hora que en la mayoría de los casos se respeta, con un margen no
superior a los diez o quince minutos y siempre a consecuencia de que alguna
visita anterior haya precisado de más tiempo del estipulado por consulta. Yo no
he visto nunca aglomeración en los pasillos ni gente esperando necesariamente de
pie; nunca, y son muy frecuentes, más de lo que yo quisiera, mis visitas al
Centro. Es más, si en alguna ocasión y por necesidad he tenido que acudir sin
cita, he procurado hacerlo en el tramo final del horario de consulta y jamás
podré decir que he sufrido algún inconveniente.
Si la cita
es a primera hora para hacerse análisis, todo el mundo va ya con un número
adjudicado al concertarla y el proceso es tan rápido, ordenado y atendido por
personal suficiente, que en cuestión de pocos minutos han terminado.
En casos
como el de este invierno en que se ha producido una epidemia de gripe, los Centro
de Salud han estado abiertos para urgencias los fines de semana a fin de
descongestionar los servicios de urgencia habituales.
Centro de Salud de Sisante. El Alcalde sisanteño del PP hizo desistir al Consejero Echániz. |
De la atención al paciente por parte de los facultativos no dice nada Ventayol y yo le aseguro que es este precisamente uno de los puntos fuertes del Centro. Gran parte de los pacientes, sobre todo los de más edad son asiduos de las consultas y me consta que de ellos se conocen ya no solo familiarmente el nombre sino los antecedentes familiares, situaciones, tratamientos, intervenciones y un largo etc. de peculiaridades que hacen de la consulta algo próximo, íntimo, familiar.
El
tratamiento a los pacientes en los Centros de Salud son en general muy
parecidos al que describo. Tengo familiares en este tipo de trabajo y conozco
su preparación y su dedicación y más en el medio rural donde todo es más
complicado. Todo el mundo tiene un día malo y no se prodiga en sonrisas pero
esa es la excepción. Ojalá los pacientes hicieran siempre gala de la misma
categoría personal que tienen la gran mayoría de quienes les atienden.
Pienso,
Miguel Ventayol, que no eres objetivo a la hora de tratar este asunto y más
bien creo que solo pretendes arrimar el ascua a no sé qué sardina. Me queda la
satisfacción de saber que lo que dices carece de fundamento y es contrario a la
opinión de la mayoría de los usuarios. Ni hay aglomeraciones ni las consultas
se eternizan; otra cosa es que tú lo quieras ver así.
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