domingo, 15 de febrero de 2015

MADURO TAMBIÉN NOS EXPROPIA




MADURO TAMBIÉN NOS EXPROPIA

Se expulsó a  los judíos y se les incautaron sus bienes; poco después se hizo lo mismo con los moriscos. Pasado el tiempo los liberales,  con  la desamortización de Mendizábal y Madoz, despojaron  a la Iglesia de sus posesiones. La segunda República expropió desde las fincas andaluzas hasta los jamones que los ricos tenían colgados en sus despensas. Los socialistas de Felipe robaron descaradamente las posesiones a Ruiz Mateos y se hicieron posteriormente con Banesto.. El gorila de Hugo Chávez expropió las tierras a los españoles en Venezuela y la corrupta peronista Cristina Fernández de Kirchner expropió IPF a la española Repsol. El candidato a la alcaldía de Madrid, Antonio Miguel Carmona pretende expropiar las viviendas vacías, Podemos amenaza con expropiar todo de todos y ahora el simio de Maduro amenaza con expropiar Telefónica, Repsol, BBVA, Mapfre, Iberia, Air Europa y Meliá, nada menos y de un plumazo.

¿Tendrán estos algo que ver?
 España es el paraíso de las expropiaciones,  derivadas seguramente de uno de los pecados capitales que más afectan  a los españoles, la envidia. Si  la cosa se queda en casa no es lo más grave. Lo bienes de judíos y moriscos se los quedó la Corona; los de la Iglesia los acaudalados de la burguesía rural; lo de Rumasa los amigos de González, Cisneros, Sarasola, Palomino, etc.; Banesto se vendió al banquero amigo de los socialistas, Emilio Botín. Ahora, cuando el asunto afecta a bienes españoles  lejos de nuestras fronteras ya es diferente. Empezó  Fidel Castro con las fincas de los españoles en Cuba; siguió Hugo Chávez con las mismas en Venezuela, Cristina Fernández que se quedó con  IPF en Argentina y muy pronto Tsipras no va a expropiar los veintiséis mil millones de vellón que le prestamos. Esto no puede seguir así, no hay cuerpo que lo aguante.

Ya lo que nos faltaba, la amenaza del simio venezolano. En el proceso de evolución humana, Nicolás Maduro debe ser bastante anterior a Atapuerca y de ello se están aprovechando una cuadrilla de trileros sinvergüenzas que le han visto al pan bajo el sobaco, se están enriqueciendo a base de adulación y cual apóstoles, pero con los bolsillos llenos, se lanzan al mundo a pregonar la buena nueva de la justicia y la democracia bolivarianas.

Un detalle contradictorio. En aquellos tiempos no se había inventado la gorra.
El simio Maduro ha llamado a los representantes de las mayores empresas instaladas en Venezuela, Telefónica, Repsol, BBVA, Mapfre, Iberia, Air Europa y Meliá para amenazarlas de que si no plantan cara a Rajoy y su Ministro Margallo y les hacen callar en sus críticas a Podemos, sus protegidos apóstoles  y al segundo en la escala bolivariana, Diosdado Cabello, dedicado al parecer al negocio internacional de la droga, les va a nacionalizar y expropiar sus bienes. Dice el simio Maduro (aconsejado por Podemos) que el talón de Aquiles de España es su entramado de empresas multinacionales, esas mismas empresas que los de Podemos pretenden cambiar de mano si llegan al gobierno.

¿No será que esa cuadrilla de sinvergüenzas está presionando al simio venezolano para que en España se haga la vista gorda en sus escándalos financieros?. Seguramente como el dinero es más difícil de hacerles llegar visto lo visto, estarán supliendo su falta con el apoyo del régimen chavista que chantajea al Gobierno español y le obliga a consentir si  no a bendecir la trayectoria delictiva de este grupo de estafadores. Si así fuera, los de Podemos estarían muy próximos a cometer el delito de traición a la Patria desde el momento en que colaboran y se asocian con un Estado que pretenden perjudicar los intereses de los españoles. El Gobierno debería investigar la implicación de Podemos en estas amenazas del simio  Maduro porque aquí hay gato encerrado.



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