ADIOS A LA CCM



ADIOS A LA “CCM”

Estamos asistiendo con excesiva pasividad y mayor desinformación a uno de los capítulos más tristes de nuestra andadura como Comunidad Autónoma dentro del constitucional Reino de España. La pérdida definitiva de la Entidad socio-bancaria que asumió el nombre toponímico con la pretensión de encauzar y administrar la economía de los castellano-manchegos, la Caja Castilla La Mancha, nuestra entrañable CCM, es ya un hecho y por mucho que desde Toledo se empeñen en vendernos humo, la CCM como tal se fue al garete. Mejor dicho, desde el Palacio de Fuensalida y túneles adyacentes la mandaron al garete

El próximo 1 de Julio, según el calendario previsto, la Caja Castilla la Mancha “CCM” dejará de ser lo que fue para convertirse en el “Banco CCM” que es una forma de revestir de manchego al Banco Liberta, propiedad de Cajastur, la Caja de Ahorros de Asturias que ha licitado a la baja por la maltrecha caja manchega; o dicho en román paladino, que se la ha quedado por cuatro perras.

Seguramente, a partir del 1 de Julio siga el mismo logotipo luciendo en los edificios y lo de “Banco” aparezca en letra menuda apenas legible, pero a los castellano-manchegos se nos seguirá vendiendo la milonga de que sigue siendo la misma CCM y su sede, en este caso ficticia, seguirá estando en Cuenca, la ciudad totémica que aún rinde culto al toro de barro. De esta forma los políticos causantes del desastre podrán mal-justificar sus vergüenzas y concurrir el próximo año a las urnas con las cabezas altas, suspendidas por el hilo del guiñol. Mientras tanto, los beneficios irán a la casa matriz asturiana, aunque nos sigan llenando los ojos de ”obra social”, otro invento para justificar lo injustificable, que se irá difuminando en el tiempo hasta desaparecer.

Nada se sabe del futuro de sus tres mil empleados ni de su red de oficinas. Sí sabemos que habrá cerrado el año 2009 con más de quinientos millones de euros en pérdidas y que su quiebra sería inminente. También sabemos que aquí, como de costumbre, no dimite nadie a menos que lo cesen como es el caso de los ex directivos. Los responsables políticos de la quijotesca ruina del aeropuerto de Ciudad Real, que se llevaron de La Roda por una bajada de pantalones del ahora ex presidente manchego, no solo no dimiten que eso supone reconocer el error, sino que se empeñan en “mantenella” a toda costa y hacernos creer en el milagro, mientras bajo cuerda han comisionado al cesado presidente de la Caja para deshacerse del muerto, haciéndonos creer que se trata de una inversión de capital internacional que confía en la viabilidad y grandeza del proyecto. Eso sí, comisiones por medio que aquí nadie trabaja por la cara.

Pero si grave es todo esto, no se queda atrás la actuación del Instructor del Banco de España, que no encuentra motivo de sanción penal para los responsables de este desaguisado, de forma que propone para la veintena de encausados una sanción económica de entre cinco mil y cien mil euros y una irrisoria “amonestación pública”. Al ex presidente Moltó una multa de ciento cincuenta mil euros y la inhabilitación para ejercer de administrador o director de cualquier entidad de crédito y también la amonestación pública, que nunca llegará al escarnio que este mismo sujeto hizo del ex presidente del Banco de España Mariano Rubio.

Aquí no ha pasado nada. Los ex consejeros ya están todos colocados y bien colocados; los grandes deudores de la entidad se han volatilizado, las pérdidas habrán sido enjugadas con nuestros impuestos, la imagen de nuestra Comunidad dentro y fuera de España será una vez más tercermundista y nosotros, como Felipe II con la armada invencible, echaremos a la culpa de todo a “los elementos”.

¡Pero bueno!, ¿quién ha dicho que la Caja …? , ¿Os vais a creer esa sarta de mentiras …?, ¿Es que no veis que ahí sigue poniendo “CCM” como siempre?, ¿Os vais a dejar engañar por …?. ¡Vivir para ver!.

Paco del Hoyo

Carta del Director “6 Flores" Nº 21, Marzo 2010