EL DÍA DESPUÉS
A burro muerto cebada al rabo,
dice el refrán, y aplicándolo al fallecimiento ayer del Estado de derecho, que
venga ahora la fiscalía a alimentarlo con querellas. El Estado de derecho
falleció ayer 9 de noviembre víctima de la osadía de unos y de la cobardía de
otros. Ahora los segundos pretenden hacer la pantomima de una querella contra
los primeros para taparnos la boca al respetable.
Estos políticos de baja estopa
nos han tomado por gilipollas al resto de los españoles. Si ayer ni el Tribunal
Constitucional ni fiscal o juez alguno de la Cataluña sedicente impidieron la
farsa del referéndum, hoy pretenden hacernos creer que la querella contra tres
rebeldes del Gobierno catalán planteada por la fiscalía catalana ante un
tribunal catalán va a salir adelante y vamos a ver a Mas inhabilitado y en la
cárcel. Vamos hombre, que ya somos maduritos como para creer en milongas. Perro
no come perro. Catalán no come catalán -que quede claro que al referirme a
catalán lo hago pensando en quienes solo quieren ser catalanes y en quienes
hacen el doble juego-
El ausente no se atrevió ayer a
dar la cara y encima hay quién confundiendo prudencia con cobardía sale en su
defensa alegando que lo hizo por evitar males mayores, así como si cerrar los
colegios y detener a cuatro traidores fuera más grave que fenecer el estado de
derecho, al que si ya poco se le respetaba en vida, ahora difunto no habrá ni
carro para el entierro. El ausente, D. Mariano, está a la espera de que alguien
le saque las castañas del fuego, ¿un juez catalán tal vez?, pues siga, siga
esperando, hasta que las ranas críen pelo, que no antes ningún tribunal catalán
va a tomar represalias contra los suyos.
Hay veces en que las victorias
son tan tristes como las derrotas. Ayer fue una de esas veces. La gloria de Mas
fue tan efímera que antes de terminar el recuento ya estaba “el bizco”
apretándole las clavijas para hacerle salir al balcón a proclamar por enésima
vez el estado catalán. Para eso están precisamente, como para dejar a Mas
saborear las mieles de una farsa que ellos forzaron y ahora pretenden
arrebatarles.
El que pretende parecer que ha
ganado también en esta contienda es “Pedro I el guapo”, vasallo de la sultana
de Sevilla, que aprovechando el acojone de D. Mariano se ha lanzado hoy a la
conquista de Las Ramblas con el mensaje de “yo estoy con Cataluña, yo soy la
solución”. Digo de él lo mismo que dije días atrás de Miguel Bosé, “qué boda
sin la tía Juana”. El tipo se presenta en Cataluña poco menos que a felicitar a
Mas y Cía. y a venderles la burra de la tercera vía, la del Estado Federal
Asimétrico , en la que vascos y catalanes se comen la mayor parte del pastel y
el resto de españoles a tomar por retambufa.
Digo yo en mi modesta opinión que
¿no sería más conveniente que el tal “Pedro I el guapo” revalidara primero su
sospechoso nombramiento con una victoria electoral? ,¿y después de esta
victoria fuera capaz de congregar en torno a su propuesta las tres quintas
partes de las Cámaras?, ¿y una vez conseguido esto planteara un referéndum y
convenciera a la mayor parte de los españoles de que tienen que renunciar a ser
ricos para que una pequeña parte de ellos lo sea?. ¿No sé si es que este
pimpollo está en el limbo o es que es el
autor del cuento de La Lechera”.
La sultana de Sevilla, que
también necesita confirmar la alternativa, le ha enviado a vender la burra a
los catalanes sediciosos para ver si saca algo de provecho entre los
desnortados socialistas catalanes y allá que se presenta el intrépido con el
mensaje, mientras le dice a la burra “tente mientras cobro”, porque sabe que la
burra de la tercera vía tiene de vida lo que tarde en cruzar Despeñaperros.
El día después es el que sigue a
cada día. Bien, pues a partir de ahora todos los días y los de después
tendremos la monserga de Mas amenazando con elecciones plebiscitarias si en
Madrid no le hacen caso. Se han emitido
alrededor de un millón ochocientos mil votos. Contando a los que han
votado hasta tres veces, a los menores de edad, a los muertos, moros, sudacas,
rumanos, chinos y marcianos, no se llega al 20% de los catalanes con derecho
legal a voto. Mas no debe ir a la cárcel, su lugar está en el manicomio.
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