LA TRIPLE
OFERTA DE SÁNCHEZ
¿No queréis
caldo? Pues tomad, tres tazas. Eso es lo que más o menos ha venido a decir
hoy Pedro Sánchez a todos los que contra él conspiran, a sabiendas de que ninguno
de ellos va a abrir la boca. Apoyar a Rajoy, nuevas elecciones o Gobierno de
cambio, ¡toma castaña!, a ver cómo se come eso. Ah, y por si no lo tienen claro
va a pedir ayuda a ese ejército de ciento cincuenta mil fieles que aún siguen afiliados, tan radicalizados que están
mucho más cerca de los postulados de Iglesias –al que adoran a escondidas- que
de los argumentos vacuos de su jefe.
Los
conspiradores no tienen otro camino que seguir diciendo no a un gobierno de
Rajoy, lo cual no es complicado. No pueden decir en público que quieren nuevas
elecciones porque sería echarse encima la responsabilidad de este periodo de
incertidumbre y además entrarían en contradicción con lo que acordaron hace unos
meses. Solo les queda la alternativa del Gobierno de cambio, que es una milonga
con la que el lunático de Sánchez pretende alimentar la ignorancia de sus bases
y que entra en contradicción con otro de los acuerdos firmados por el Comité Federal, no a los independentistas.
De los tres
puntos acordados en el Comité Federal, no a Rajoy, no a las elecciones y no a
los nacionalistas, al menos en el tercero van a tener que ceder los
conspiradores y consentir la huída hacia adelante del fugitivo de sí mismo, Sánchez,
hacia ningún lado, porque está claro que Ciudadanos no entraría en ese
cambalache ni Pablo Iglesias tampoco; que una cosa es jalear a Sánchez para que
se tire al ruedo y otra muy diferente es salir a hacerle el quite, y menos ahora cuando los
podemitas creen de verdad en el sorpasso si se repiten las elecciones.
Además de
las tres tazas, al que más piaba, Page, le ha mandado Sánchez un aviso a través
de un interesado Podemos, un aviso del que se benefician los dos, Sánchez
debilitando a un conspirador y los podemitas obligándole a tener que tragar
sapos y culebras si quiere seguir en Fuensalida. Al maño y al bellotari también
les ha llegado el aviso de boca del gaucho de la pampa, para que el día uno
digan si al que llaman Gobierno Frankestein , que solo van a apoyar de boquilla
y que además saben que es imposible .
En esta
maniobra Sánchez se ha metido un gol en
su portería porque de las tres propuestas
de su órdago solo cabe aceptar la tercera, que con él a la cabeza o con el
mismo Espíritu Santo, conducirá sin duda a un nuevo fracaso, a nuevas elecciones
con pronóstico de sorpasso sorpassísimo
. Sánchez está ciego por seguir, si no en Moncloa al menos en Ferraz y Pablo
Iglesias II, que es infinitamente más avispado, se está recreando en marearlo
con todas las artes de muleta que se conocen. Esta semana va a ser de infarto.
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