miércoles, 28 de marzo de 2012

Las dos caras de la noticia ¿Cree que está justificada la subida de la factura eléctrica entre un 5 y 7%?

Miércoles, 28 de marzo de 2012
 
El déficit de tarifa y las renovables tienen la culpa

Francisco del Hoyo, Director de la Revista '6 Flores’
 
El déficit de tarifa es un pago aplazado de la factura eléctrica que no puede exceder de 1.500 millones de euros anuales y que asciende ya a 24.000 millones de euros. Al habernos pasado de ese límite anual, las compañías eléctricas han recurrido al Supremo para cobrar el exceso, de ahí que haya que subir el recibo en el porcentaje necesario para cubrir la deuda. A partir de enero de 2013 se elimina el sistema de déficit de tarifa y el resto, 24.000 millones de euros, se irán abonando a largo plazo. Pagamos por el kilovatio consumido un precio inferior al de coste, generando una deuda que ahora se nos reclama. ¿Qué encarece el recibo de la luz? Por el consumo y transporte pagamos el 42%; por impuestos, el 20%; por amortización del déficit de tarifa y moratoria nuclear, el 18%. Pero, ojo al dato, por subvenciones a la producción de energías renovables, solar y eólica, nada menos que el 20% del recibo. No solo son las energías más caras de producir sino que además se subvenciona a los que la producen. No es extraño ver plantas solares produciendo kilovatios de noche con generadores diesel. Aún salen ganando.

Las dos caras de la noticia. Elecciones andaluzas

Martes, 27 de marzo de 2012

Enhorabuena tanto a la comunidad andaluza como a los asturianos
Francisco del Hoyo, director de la revista 'Seis Flores’

En el Sur todos han ganado. Hay que repartir felicitaciones. Al PP por sus resultados, los mejores en treinta años de democracia. Al PSOE porque va a seguir exprimiendo a Andalucía aunque sea con ayuda. A IU que dobla resultados y le permiten gobernar en coalición y poner el cazo. Las condolencias hay que ofrecerlas al pueblo andaluz, que va de Herodes en Pilatos y a España entera que va a sufrir el coste de una sociedad, mitad parasitaria, que aplaude, vota y se identifica con la corrupción. La izquierda ha cumplido su misión de votar y mantener el negocio. La derecha y los indecisos, cuatrocientos mil votos perdidos, se han ido al chalet y a la playa. Hoy a lamentarse. Varapalo al señorito Arenas que menospreció a los andaluces no acudiendo al debate de Telesur y a Rajoy por haber dejado la TVE en manos del adversario. En el Norte, felicitaciones al PSOE que gana por aburrimiento del personal y colleja al otro señorito, Álvarez Cascos, por marear la perdiz y no avenirse a razones que ahora tendrá que tragar. ¿No querías caldo?, dirán en el PP; pues toma dos tazas, Paco.




¿Por qué no hago huelga?

Lunes, 26 de marzo de 2012
Francisco del Hoyo

Se aproxima el día 29, día de la gran juerga sindical. En el momento que esto escribo no se ha votado en Andalucía y, aunque intuyo los resultados, prefiero ser cauto y no hacerme demasiadas ilusiones de que vaya a gobernar el PP. La huelga del día 29 es una huelga política, interrelacionada con las elecciones andaluzas cuyo voto de izquierdas estimula, calentando el ambiente, con el pretexto de una crisis en la que dicen no tener nada que ver y una reforma laboral a la que no quisieron aportar nada. Es una huelga política porque está concebida, desarrollada y justificada por toda la izquierda pero en especial por el derrotado PSOE donde más pronto que tarde se van a comer unos a otros si pierden el último reducto que les queda, Andalucía. Recuerdo a Méndez justificando la huelga general que le hicieron a Aznar con el siguiente y único argumento: “El… éste no se va a ir de rositas”. Sólida argumentación que también sirve para el momento. A las élites de CCOO y UGT no les preocupa que los obreros tiren del ramal sino que a ellos les bajen del burro. A los que no hagan huelga el día 29 no les faltan motivos. Basta ver que de todas las organizaciones sindicales de nuestro entorno europeo comunitario, los dos sindicatos mayoritarios españoles son los más dependientes de la subvención estatal, son los menos transparentes, los más politizados y también los menos solidarios.

Los más dependientes porque, a diferencia de los sindicatos europeos, los españoles perciben del Estado, CCAA y Ayuntamientos la mayoría de sus ingresos, vía subvenciones directas, “devoluciones” de patrimonio, cursos de formación, consejos de administración de empresas públicas y otras mil gabelas. La mayoría de los sindicatos europeos se financian únicamente con las cuotas de sus afiliados y algunos de ellos, que tienen a su cargo la administración de las prestaciones de desempleo y otras ayudas, tienen también muy clara la separación entre los fondos públicos que administran y los suyos propios.

Son los menos transparentes porque la ley no les obliga a ser auditados con lo cual, ni se conoce el número de afiliados que tienen ni los que pagan ni las cuotas que estos aportan. No hay transparencia en la gestión del entramado de empresas patrimoniales, de gestión, de asesoramiento y de otras y extrañas finalidades. No pagan impuestos, ni siquiera por el patrimonio inmobiliario que poseen. No dan cuentas a nadie de los fondos públicos recibidos del bolsillo de todos los españoles. Nadie inspecciona el desarrollo de los cursos de formación, muchos de los cuales solo requieren la firma del alumno acreditando la asistencia a los mismos. No se vigilan las subcontratas con otras empresas de formación, a veces constituidas por personas muy allegadas a su entorno. En fin, administran cientos de millones de Euros del erario público con la mayor opacidad y sin el más mínimo control de la Hacienda o la Intervención del Estado.

Los sindicatos europeos en su gran parte dedican toda su actividad a la defensa de los derechos de los trabajadores y a mejorar sus condiciones laborales, libres de contenidos ideológicos y ajenos a la contienda política por el poder. Nuestros sindicatos no son ideológicamente asépticos sino políticamente beligerantes. Asociados a los partidos políticos de izquierda con un objetivo común hasta el extremo de la doble militancia obligatoria en alguno de ellos. Las élites sindicales forman un núcleo impenetrable que manejan todo a su antojo con la única finalidad de sobrevivir en el cargo y han extendido sus redes por todos los rincones del Estado y su Administración, de modo que nada escapa a su conocimiento y control. De esa manera actúan como un gobierno en la sombra aun careciendo de toda legitimidad pero adulados con mimitos por los corruptos gobiernos socialistas que por la España hubieron y que a la publicación de este artículo permitan Dios y las urnas que ya sean historia. Otra y quizás la peor de las características de este sindicalismo de lujoso corte es la ausencia total de solidaridad con quienes dicen representar.

Nuestros sindicatos son los menos solidarios de Europa. Los cinco millones y medio de parados no existen para ellos. Los parados no hacen huelga, no pagan cuotas, no producen beneficios. Son solamente un número de siete cifras repetido en mil pancartas que utilizan miserablemente como justificación de su desvergüenza. Tampoco son solidarios con aquellos que estando en apuros requieren su ayuda. En vez de negociar salidas fuerzan rupturas porque tras ellas vienen los ERE, que les producen pingües beneficios. No defienden a los obreros con problemas sino que se aprovechan de ellos. A ERE cobrado y obrero en el paro, mil euros más y un problema menos. Cuando los obreros van a la huelga a costa de perder sus salarios, el ejército de casi sesenta mil liberados y otros pocos miles de su estado mayor cobran cada día el suyo y hasta con dietas, desplazamientos y horas extra. No hay un fondo de resistencia como en otros países de Europa para ayudar por esa pérdida salarial. Ellos no lo necesitan. Y termino mostrándoles un detalle más de su fondo egoísta e insolidario. No tengo conocimiento de que CCOO y UGT dispongan de comedores sociales para atender a tantos y tantos obreros con dificultades. A los pobres condenados laboral y socialmente al ostracismo no les dan de comer CCOO ni UGT. Aunque les pese a ambos, les da de comer Caritas.

martes, 20 de marzo de 2012

Día Internacional de la mujer.
La violencia de género (I)
Lunes, 5 de marzo de 2012

Desde que el mundo es mundo, como suele decirse, todas las culturas y civilizaciones han establecido una línea muy clara de la división de funciones entre el hombre y la mujer, siempre condicionada esta última por los problemas derivados de la maternidad. El hombre fue cazador, luego agricultor, más tarde ganadero, después artesano y al final industrial. En todo este proceso la mujer curtió las pieles, sembró y recolectó, ordeñó los animales y manufacturó sus productos, trabajó los telares etc. y además de todo esto parió y crió a sus hijos al tiempo que cuidó y alimentó a la familia. Cierto es que el trabajo del hombre hasta hace bien poco le dejaba escaso margen para otras actividades, como cierto es también que cualquier cambio en la situación laboral de la mujer no la ha desligado de las labores domésticas. Ni la revolución francesa ni la revolución industrial ni la revolución comunista liberaron a la mujer de su carga a pesar de consagrar principios de igualdad y oportunidad para ambos sexos.

No obstante, la revolución industrial que incorporó masivamente a las mujeres al mundo laboral así como la valiosa intervención de éstas en ambas guerras mundiales y la resolución con que resolvieron la difícil situación de las posguerras, hizo crecer en el mundo occidental un reconocimiento de su capacidad que les permitió, con paso lento pero firme, conquistar sucesivas parcelas de opinión y de poder.

La revolución femenina (por llamarla de alguna forma) es la mayor revolución social desde la revolución industrial y trata de aproximar hasta igualar en derechos, deberes y libertades a los individuos de la sociedad moderna sin discriminación de sexo. Por desgracia este movimiento femenino no está teniendo el mismo eco fuera de nuestra civilización occidental y aún dentro de ella con muchos niveles y matices, (en Francia e Italia no consiguieron las mujeres el derecho al sufragio hasta 1945 y en Suiza hasta 1974) pero es evidente el alejamiento que se va produciendo respecto a otras culturas, quizás más antiguas que la nuestra donde aun permanecen valores culturales distintos, tan arraigados que dificultan cuando no imposibilitan cualquier evolución en la consecución de los derechos más elementales.

Todas las revoluciones son cruentas y en mayor o menor medida todas pagan su tributo de sangre. La femenina se ha caracterizado por ser la menos violenta de cuántas hemos conocido y fundamentalmente por dos razones, la primera porque se está dilatando en el tiempo, con pasos cortos pero seguros y la segunda porque viene acompañada de una evolución cultural que permite aceptar como normal lo que tiempo atrás hubiera parecido aberrante. Cuando alguna de estas dos razones se invierten los resultados pueden llegar a ser catastróficos. Éste es el caso de nuestra sociedad española actual, que nos ofrece con más frecuencia de lo deseable espectáculos bochornosos. Los orígenes de este movimiento / revolución fueron diferentes según de que país se tratara; así en plena efeverscencia de la Francia revolucionaria, Olimpia de Gouges publicó la “Declaración de los derechos de la mujer y la ciudadana” dando lugar a un incipiente movimiento que se frustró al ser ésta ejecutada por la dictadura jacobina. Los movimientos posteriores fueron acallados por la enorme influencia de la Iglesia entre la población femenina francesa, no habiéndose consolidado el derecho al sufragio femenino hasta el año 1945.

En el Reino Unido Lydia Becker creó la “Asociación Nacional para el Sufragio de las Mujeres” después de haber visto rechazada en el parlamento la propuesta de John Stuart demandando la legalización del voto femenino. No obstante, a comienzos del siglo XX el 70% de las solteras entre 20 y 45 años tenían ya trabajo remunerado. En USA el analfabetismo femenino ya estaba erradicado a principios del siglo XIX y la contribución de las mujeres en la lucha por la abolición de la esclavitud fue notorio, pero la Guerra de Secesión consiguió el derecho al sufragio de los negros y en cambio lo negó a las mujeres a pesar de su participación activa y comprometida en la contienda. Ello dio lugar a la creación de la “Asociación por el Sufragio de la Mujer” que cimentó el primer movimiento feminista de corte radical.

En España a finales del siglo XIX el 70% de la población femenina era analfabeta y aunque hubo voces que se levantaron por la igualdad de la mujer como la escritora gallega Emilia Pardo Bazán o la penalista Concepción Arenal y el avance educativo conseguido por la Institución Libre de Enseñanza, la presión de la sociedad y de la Iglesia truncaron sus propósitos. Como he apuntado anteriormente, en algunos países europeos y del norte del continente americano, la revolución industrial atrajo al mundo laboral a multitud de mujeres que sintieron la necesidad de organizarse para luchar por unos horarios y unos salarios justos y equiparados a los masculinos. A continuación, y antes de haber conseguido todo lo anterior, hicieron valer sus derechos como personas exigiendo su derecho al sufragio en igualdad con los hombres hasta conseguirlo.(en Inglaterra, Alemania y Holanda en 1918, USA en 1920, Suecia 1921, España 1931 ) Pero todo esto no se hizo en un día. Se realizó a lo largo de todo el siglo XIX y principios del XX. Mientras tanto, la España eminentemente rural y profunda, que para colmo acababa de perder las colonias, apenas dejaba abierto un hueco por donde colarse el tren de la modernidad. (Continuará).

Francisco del Hoyo (http://www.pacodelhoyo.blogspot.com/) (El Pueblo de Albacete 05/03/12)
Accidente en Maestranza
Lunes, 19 de marzo de 2012

El pasado lunes se producía un lamentable accidente laboral en la Maestranza Aérea a consecuencia de la cual falleció un técnico civil de la misma. Es el primer accidente mortal que se produce en Maestranza desde su creación en 1939 a pesar de que en ella se realizan trabajos de alto riesgo.

La Maestranza Aérea de Albacete se creó por Decreto de 24/11/1939 con la misión de mantenimiento, revisión y reparación de la dispersa y variada fuerza aérea que sobrevivió a la Guerra Civil, los Polikarpov y Katiuska rusos, Savoia y Caproni italianos, Heinkel alemanes etc. Posteriormente han pasado por ella aviones de escuela, Bücker , Beechcraft y Casa 101; de transporte, Caribou; apaga fuegos, Canadair y aviones de combate como el Mirage F-1, McDonnel Douglas F-18, siendo la última incorporación el más moderno avión de combate de la fuerza aérea, el Eurofighter F-16, que muy pronto volará sobre los cielos de Albacete. En Maestranza trabajan alrededor de quinientos obreros y técnicos civiles, altamente cualificados y unos cien militares, muchos de ellos con titulación de ingenieros aeronaúticos e industriales, técnicos y superiores.

La Maestranza aérea de Albacete se caracteriza por disponer de unas instalaciones altamente sofisticadas, con una tecnología punta y un personal con una profunda formación adquirida en España, Francia, USA etc. Han sido miles los obreros que han pasado por sus talleres y se han formado en ellos, creando la gran familia que conforma una Institución muy querida y valorada en Albacete, en cuya historia del último siglo, la aviación ocupa numerosas, importantes y gloriosas páginas.

Testimonio de esa gran familia fue la manifestación de duelo en torno al compañero fallecido en el accidente del lunes. Con una ceremonia castrense brillante pero a la vez emotiva, sencilla e íntima, las autoridades militares y civiles y los compañeros y amigos que abarrotaban el hangar, despidieron al primer compañero fallecido de esta histórica Institución.

La nota discordante, como no podía ser de otra manera, fue la de algunos representantes sindicales de U.G.T. que, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y el Arroyo Piojo por la calle Ancha, vieron la oportunidad de hacer ruido, que es lo que se lleva ahora, para ir caldeando el ambiente y lanzaron la soflama a las emisoras de radio y un comunicado de prensa diciendo nada menos que “este fatal accidente pudiera ser consecuencia del deterioro que vienen sufriendo las condiciones de seguridad en el trabajo de los empleados de la Real Maestranza Aérea de Albacete, tal como han manifestado en reiteradas ocasiones, llegando incluso a concentrarse a las puertas del establecimiento militar” y aseguraban que “sí se han movilizado los empleados por esas condiciones que sufren mientras realizan sus labores profesionales dentro de las instalaciones aéreas”, y como no atacar de paso la reforma laboral diciendo “el tema de la seguridad se va a ver aún más reducido y mermado de lo que está actualmente”

Más prudente fue el representante de CC.OO. que manifestaba “No creo que sea este el momento de ponerse a hablar de esto. Ahora, lo primero es investigar qué es lo que realmente ha pasado…”

Los locuaces sindicalistas se equivocan de cabo a rabo. En Maestranza, que por cierto no es “real”, basta echar un vistazo al entorno para comprobar que la limpieza, el cuidado y el orden marcan la pauta de comportamiento de la Institución. Pero es más, si hay algo que está especialmente cuidado es el sistema de seguridad y protección de riesgos laborales. He hablado personalmente con bastantes trabajadores y todos coinciden en que no existe tal deterioro en las condiciones de seguridad, que son posiblemente las mejores de Albacete. Los EPI (equipos de protección individual) afirman, son de lo mejor y más caro del mercado y los hangares están en perfecta condición habiendo pasado todas las inspecciones de seguridad obligatorias. En cuanto a las protestas, me apuntaban que sí es verdad que se han manifestado en varias ocasiones pero siempre por motivos diferentes, salario, horarios, etc, no precisamente por temas de seguridad.

Ello me lleva a deducir que los comunicadores de UGT, que no deberían ser de Maestranza, tenían muy poca idea de lo que se cuece en esta Institución; más bien pienso que deben ser de los que pasean cada año las pancartas del “no a todo”, a la guerra, la OTAN, los Tigre, las FF.AA. y todo lo que huela a milicia, pidiendo a voz en grito el cierre de los mayores centros de trabajo de Albacete, que entre la carretera de Murcia y la de las Peñas ocupan a casi dos mil personas. Dos mil familias que en una ciudad pequeña como Albacete no son de perder. El caso es hacer ruido, días atrás en los medios de comunicación y hoy en una ridícula e insignificante manifestación, seguramente de liberados, ante la Subdelegación de Defensa. Yendo contra la razón solo se llega lejos en este país de pandereta pero los caminos se les están haciendo ya más cortos y más estrechos. Ellos mismos los están estrechando por olvidar cual es la causa fundamental para la que existen, que no es vivir lujosamente a costa de los curritos y los contribuyentes sino la de trabajar por el bienestar de unos y otros. El día 29 acudirán de nuevo los piquetes a la puerta a “informar” pero esta vez no va a ser igual. Perdieron la razón, perdieron la oportunidad y por perder éstas perdieron el prestigio. Ya solo les queda el ruido.
               (El Pueblo de Albacete, 19/03/12)

lunes, 12 de marzo de 2012

DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER.
 LA VIOLENCIA DE GÉNERO (II)
Lunes, 12 de marzo de 2012

Llegó la primera guerra mundial y esas mujeres tuvieron que sustituir en las fábricas a los millones de hombres movilizados. Gracias a ellas se aseguró el aprovisionamiento de armas y enseres en los frentes. Al final de la guerra millones de ellas quedaron viudas, en países desolados y con coberturas sociales inexistentes. Se ganaron palmo a palmo y día tras día su autoridad moral y su prestigio social.

No acababan de reponerse de las calamidades de los veinte años anteriores cuando una nueva tragedia arruinaría sus expectativas de futuro. La segunda gran guerra les hizo volver a las fábricas y los hospitales y entre momentos de dolor y de esperanza fueron haciendo cañones, tanques, barcos, mantas, vendas y latas de conservas. Al final, bastantes millones más que en la primera contienda quedaron viudas. Siguieron cubriendo puestos en la renaciente industria de la posguerra y poco a poco llenando las universidades. De nuevo estaban conquistando parcelas importantes sin posibilidad de marcha atrás; así hasta nuestros días.

Mientras todo esto ocurría en Europa nosotros pasamos el siglo XIX arrastrando el arado en un país caciquil y feudal. Fue un siglo desgraciado en la historia española, que comenzó con la guerra contra los franceses, continuó con las guerras carlistas y terminó con la pérdida de las colonias Y llegados al siglo XX, nos pasamos el primer tercio en disputas internas que acarrearían trágicas consecuencias, que no debemos olvidar ni tampoco debemos tener tan presentes hasta el punto de traumatizar nuestra convivencia presente y futura.

Nuestras mujeres solteras apenas conocieron las fábricas fuera de Madrid, Barcelona o Bilbao. La sociedad española era sobre todo una sociedad rural en donde el papel de la mujer no había evolucionado desde siglos atrás. Las pocas libertades conseguidas antes de la guerra murieron con ella. La dictadura las condenó a ser únicamente amas de casa.

La labor de la dictadura en el campo de la igualdad femenina fue devastadora. La “unión temporal de empresas Régimen & Iglesia” veló por mantener a nuestras mujeres “puras y castas en pensamientos, obras y deseos”; esposas y madres según el modelo mariano impuesto por la Iglesia, con dependencia casi total del marido y acceso a la educación superior restringido a las elites económicas y políticas. Si esto era grave, la involución cultural no lo fue menos y cuando, llegados a los años sesenta, la incipiente globalización nos abrió las puertas a lo desconocido, ofrecimos al mundo el grotesco espectáculo de un machismo avergonzante tras la turista sueca, de mano de los López Vázquez, Estesos, Pajares y Ozores de turno.

A los casi cuarenta años del antiguo régimen le han seguido ya treinta de democracia y los avances en este campo los vemos reflejados tristemente cada día en los telediarios. ¿Qué hemos hecho o qué hemos dejado de hacer en estos treinta años para no haber conseguido avances significativos?

A las carreras tras las suecas siguió otro espectáculo machista conocido popularmente como “el destape”, al que acudieron precipitadamente casi todas las famosas del escenario y la pantalla, denigrando la figura femenina hasta dejarla reducida en un simple objeto de deseo y mercadeo. Las prisas por parecernos a los otros europeos e incluso por superarlos convirtió el feminismo en casi una religión y se han ido sucediendo leyes para la igualdad que consagran la desigualdad y conducen al enfrentamiento.

Todos los abusos son malos y el querer imponer en el momento y por la fuerza de la ley lo que la sociedad debe digerir lentamente con el transcurso de los años es una equivocación. Las sentencias judiciales en divorcios, custodia de menores y prestaciones económicas han hecho tantos estragos en los derechos individuales, siguiendo al pie de la letra la doctrina de la nueva religión feminista, que han provocado el nacimiento de asociaciones de hombres afectados por la discriminación y la injusticia.

La igualdad no se consigue por decreto, ni con cuotas ni con ministras de la cosa. La igualdad se consigue con la educación no con la fuerza y aquí se han invertido las razones que conducen a un proceso dilatado y sin sobresaltos. Se ha querido hacer en cuatro días lo que en nuestro entorno europeo ha costado dos siglos, pero en esos cuatro días no ha habido ni intención ni tiempo suficiente para que la sociedad española evolucione culturalmente hasta unos niveles mínimos de permisividad, todo lo contrario, nuestro sistema educativo es el peor de la Europa occidental y el fracaso escolar es manifiesto. Se ha impulsado la creación de una sociedad inculta de culebrón televisivo y telebasura; una sociedad despersonalizada, de “trepas” sin escrúpulos, de personas individualistas y egoístas. Se han destruido muchos de los principios y valores que regulaban la convivencia pacífica. Con este panorama es muy difícil que podamos entender las razones por las cuales el hombre y la mujer deben tener los mismos derechos y obligaciones. Basta echar un vistazo al mapa para comprobar que la violencia está más arraigada en las Comunidades más atrasadas y en los suburbios de las grandes ciudades o ciudades dormitorio donde precisamente se alcanzan los niveles culturales más bajos. No se consigue la igualdad poniendo faldas a los hombres en los anuncios televisivos sino educándolos para una nueva forma de vida en un mundo completamente distinto. La revolución femenina triunfará porque es justa y lógica pero el tributo que aquí va a tener que pagar será demasiado caro solo porque los gobiernos y la sociedad no han hecho bien los deberes.
(Publiocado en El Pueblo de Albacete 12/03/2012)
Las dos caras de la noticia

Lunes, 12 de marzo de 2012


¿Cree que el 11M es un caso cerrado o tiene razón quienes piden su reapertura?

Si el Fiscal General del Estado reabre el caso, motivos hay

Si el CIS en alguna de sus encuestas preguntara a la gente si creen que el proceso del 11-M se cerró en falso y si están de acuerdo con que siga abierto hasta descubrir la verdad, nos asombraríamos al ver la cantidad de personas que piensa que nos tomaron el pelo. Basta ver cómo la izquierda se opone a reabrir el caso para empezar a sospechar que ello les perjudica. El tribunal no encuentra y así lo dice, al autor intelectual. Todo aquello que podía servir de prueba se destruye rápidamente de forma más que sospechosa. En cuestión de tres días encuentran un pardillo, Jamal Zougan, al que le cargan todo el mochuelo. Rubalcaba, que hoy dice que su primer recuerdo es para las víctimas no dice que seguramente su segundo será para la manipulación que hizo de la información en plena jornada de reflexión. Si el Fiscal General del Estado reabre el caso, motivos hay. Si la izquierda y la doliente Manjón ponen el grito en el cielo no hacen sino certificar que motivos hay. Si recordamos el compadreo y las concesiones a ETA en los años posteriores, sospechamos que motivos hay.

jueves, 1 de marzo de 2012

ERA DE ESPERAR

ERA DE ESPERAR
Lunes, 27 de febrero de 2012

Era de esperar, pero no que fuera tan pronto. Ya ni se respetan los cien días de gracia. ¡Qué mal perder! Cualquier excusa vale. El descontento de unos cuantos profesores de un instituto valenciano ha contagiado a sus alumnos, que salen a la calle a protestar por una razón tan peregrina como que tienen frío cuando los radiadores del centro están que queman. ¿Qué hacían unos menores de edad en horario escolar en la calle cortando el tráfico? ¿Acaso el director y los profesores no son responsables de la custodia de los alumnos menores en los horarios de clase? ¿Dónde estaban los responsables del centro, reunidos, almorzando o animando a los chavales a realizar su “machada”? ¿Pueden los padres confiar en unos profesores que permiten que sus hijos puedan sufrir cualquier percance en la calle cuando se supone que deben estar en las aulas? ¿No habría que tomar medidas contra ellos? Y a los que han ofrecido aprobado general por la “valentía” de la protesta, ¿no habría que revisar sus evaluaciones en lo que queda de curso?.

Era de esperar y el proceso es muy simple. Se registra el dominio “primavera valenciana”, que no es un reclamo turístico para oler la flor de azahar, sino una consigna revolucionaria, ciertamente más romántica que la ordinariez del “movimiento 15.m”, Se provoca la actuación, siempre extremada en uno u otro sentido, de un grupo de adolescentes que a su vez provocan a la Policía con insultos, piedras, patadas y hasta mordiscos. Se producen las primeras detenciones. Curiosamente, entre varias decenas de detenidos solo hay un alumno del Instituto Luis Vives, otros seis menores de edad y el resto una mezcla de skin. okupas, independentistas y antisistemas, la mayoría con antecedentes. Qué casualidad que la calefacción de un instituto movilice a toda la extrema izquierda valenciana. Aparece a continuación un energúmeno que dice representar a no sé qué sindicato de estudiantes escupiendo soflamas como: “esta lucha es a sangre y fuego” o “vamos a seguir quemando Valencia”, al igual que hiciera aquel otro energúmeno del metro madrileño cuando decía “vamos a reventar Madrid”. Animados por la verborrea del supuesto líder, se encaminan hacia la Comisaría para exigir la liberación “sin cargos” de los detenidos. De camino arrasan mobiliario urbano, centros comerciales y todo lo que pillan de paso. Instantáneamente y para esconder el fracaso de las protestas contra la reforma laboral, mediante convocatorias por la red surgen manifestaciones en Madrid, Barcelona, Oviedo, Sevilla, Córdoba, Granada, Almería y Cádiz. Otra casualidad el que las manifestaciones se hagan en Andalucía precisamente en estos momentos. El siguiente paso es el ataque a las sedes del PP con piedras, bolas de acero y pintura, intentándolo también en los domicilios de la Alcaldesa de Valencia y el Presidente de la Comunidad Valenciana y el remate, destrozando los equipos e impidiendo el trabajo de los informadores considerados de derechas.

En fin, todo programado. Una reedición del frente popular. El caso es demonizar a la derecha y a la sombra de los exaltados aparecen los líderes supuestamente moderados, que tiran la piedra y esconden el brazo. ¿Qué hacía la aspirante a presidir el Gobierno de España compartiendo “manifa” con lo más selecto de lo residual? Nadie se extraña de ver a Méndez y Toxo tras la pancarta. Al fin y al cabo tenían tanto “mono” de calle, de esa calle que no se atrevieron a pisar en tantos años, que estaban esperando ansiosos el pistoletazo de salida. Nadie se extraña tampoco de ver sujetando la tela a Llamazares, Cayo Lara o los de la “ceja”. Esos son fijos. De alguna manera debían hacerse notar, sumidos como están en la intrascendencia de su día a día.

A nadie se le ha ocurrido protestar porque el Ayuntamiento socialista de Parla tiene sus colegios bajo cero. Eso no tiene importancia para la Sra. Pajín, en cambio lo de Valencia es una “confabulación planetaria” de la derecha y las fuerzas represoras. A nadie dentro del PSOE, donde imagino debe haber algún dirigente sensato y responsable, se ha oído condenar los atentados contra sedes del Partido Popular o domicilios de cargos institucionales del PP valenciano ni contra los medios de comunicación no afines a su ideario. Aquí lo único que importa es ganar en la calle lo que han perdido o están a punto de perder en las urnas, porque no lo olvidemos, esta estrategia tiene mucho que ver con las elecciones andaluzas y más conociendo a quien está al frente de los socialistas. La historia se repite una vez más. La izquierda no sabe perder porque es más revolucionaria que democrática y lo uno no casa bien con lo otro. La izquierda revolucionaria, totalitaria y fascista es la que marca el rumbo. La autoproclamada izquierda democrática, si es que de verdad existe, la sigue a pies juntillas Y eso que Rubalcaba había prometido una oposición seria y responsable. Claro que, promesas de Rubalcaba…
(Publicado en El Pueblo de Albacete, 27/02/2012)