miércoles, 29 de marzo de 2017

EL FASCISMO SE IMPONE EN CATALUÑA





EL FASCISMO SE IMPONE EN CATALUÑA

Desde que en 1995 el movimiento amado revolucionario Terra Lliure anunció su disolución y gran parte de sus presos fueron puestos en libertad sin un ápice de arrepentimiento –detalle que veremos  de aquí a poco en el País Vasco-, parecía que la paz social reinaba en Cataluña, diferenciándose claramente y a veces considerada como ejemplo frente a las actividades de los cachorros herederos de ETA, que crisparon la vida social en Euskadi hasta que las fuerzas de orden público empezaron a dar con sus huesos en la cárcel.

Frente a la persistencia de la lucha armada de ETA y la kale borroka de sus cachorros, en Cataluña se ensayaba un sistema que con menos ruido habría de dar los mismos resultados, al fin y al cabo en Euskadi gobiernan ayuntamientos y diputaciones los herederos de ETA y en Cataluña los independentistas herederos de Terra Lliure. En ambos casos, los gobiernos autonómicos se encuentran acorralados  por quienes han sustituido la violencia de las armas por la de la amenaza, la coacción, el amedrentamiento, el aislamiento a quienes no participan del nuevo experimento fascista del Siglo XXI.

¿Es que el independentismo se ha vuelto racionalmente pacífico? En absoluto, lo que ha hecho es sustituir las armas por otros medios de lucha. Se ha hecho acopio de toda la parafernalia fascista, la nación, la raza, la bandera, la lengua y con todo ese bagaje se han lanzado contra el Estado democrático nacido de la Constitución de 1978,  acusándole curiosamente de fascista como forma de encubrimiento del verdadero fascismo de Bildu o de las CUP. Se está marginando la lengua común de todos los españoles reduciendo su enseñanza a horarios mínimos. Se tergiversa la historia y sobre todo en el caso vasco, se tacha de traidores a héroes vascos que a lo largo de la historia consiguieron enormes triunfos políticos y militares al servicio de la única España. Se impone por la fuerza el idioma autóctono a sabiendas de que su futuro es incierto en un mundo globalizado. Se dificulta en la administración pública cualquier trámite a quienes no dominan el idioma oficial fascista. Se señala y aparta en los centros de trabajo a quienes no comulgan con la nueva esvástica, la estelada. Se ha puesto en peligro la armonía familiar dónde la división política entre sus miembros ha llegado casi a la ruptura. Se educa en el odio a España desde las guarderías infantiles hasta las cátedras universitarias. Se están instalando en las fábricas y otros centros de producción un ejército de comisarios políticos que espían y analizan cualquier movimiento, gesto, conversación o relación de quienes se consideran sospechosos de deslealtad a los  nuevos regímenes  fascistas de Otegui, Mas, Junqueras o Gabriel. Más pronto que tarde aparecerá la figura del vecino/comisario/espía que tendrá atemorizada a toda la vecindad. Más pronto que tarde se hará pública la lista de adhesión a la causa y pobres de quienes no figuren en ella. En resumen, el independentismo ha renunciado a matar más por incapacidad que por convicción y ha encontrado otras vías para conseguir los mismos objetivos.

Con la presencia y apoyo de Anna Gabriel
 Pero dentro de ese mundo variopinto, donde el anarquismo tradicionalmente sienta sus reales y donde la lucha une mientras no se consigue el objetivo y se convierte en guerra campal una vez conseguido éste, hay quienes vuelven a estar meándose  fuera del tiesto. En Pamplona el grupo ATA, heredero de la filosofía de la banda terrorista y autor de la nueva kale borroka, ha encontrado en el gobierno de Navarra de Uxue Barkos el calor y la comprensión de todo el mundo abertzale y salen a la calle animados por la impunidad que les proporciona un Estado débil y una Justicia dividida. En Barcelona ocurre igual con los fascistas de Arran, el grupo joven más violento de las CUP, que inducidos y apoyados por sus dirigentes Anne Gabiel y por el exdiputado David Fernández salen a la calle a tomarse la venganza por su mano y atentar contra quienes no comulgan con su ideario fascista. Esta vez contra la sede del PP, otras contra las de Ciudadanos; mañana construirán guetos – al estilo Varsovia- para aislar a todo lo que suene a español, amparados igualmente en la impunidad que les proporciona la “justicia catalana”, la debilidad del Gobierno de España y el apoyo incondicional de las Instituciones catalanas. 

La TV pública al servicio del independentismo
 Lo mismo ATA que ARRAN son el embrión violento y paramilitar del fascismo, apoyados por EH-Bildu y por las CUP respectivamente, que a su vez controlan y dirigen el movimiento secesionista en Euskadi y Cataluña. Es el nuevo fascismo. La ikurriña y la estelada son las primas hermanas de la esvástica y por mucho que a Romeva se le llene la boca de llamar falangistas a los que acudieron a la manifestación pro-española en Barcelona, aquí el único fascismo es el de las CUP, el de Colau y el de todo el entramado catalanista secesionista. En una cosa llevaba razón Puigdemont en su discurso ante 90 personas –la mitad estudiantes catalanes- en la prestigiosa Universidad de Harvard, al tachar a España como un país atrasado. Tan atrasados que en vez de coger de una puñetera vez al toro por los cuernos en el asunto catalán, el Presidente Rajoy se va a Cataluña a regalar a los catalanes  4.200 millones de Euros ganados con el sudor de la frente de todos los españoles y succionados por el ministro sanguijuela. Ni un representante del “gobern”, que estaban aplaudiendo por lo bajo el asalto a la sede popular. Eso sí, los recepcionistas del regalo no faltó ni uno, esos empresarios catalanes que ponen una vela a Dios y otra al diablo y que como  dice el cantar, “al olor de la sardina el gato ha resucitado”. 


miércoles, 22 de marzo de 2017

¿POR QUÉ TANTO ODIO?




¿POR QUÉ TANTO ODIO?


 Lo define la RAE  como “Sentimiento profundo e intenso de repulsa hacia alguien que provoca el deseo de producirle un daño o de que le ocurra alguna desgracia” y como “Aversión o repugnancia violenta hacia una cosa que provoca su rechazo”.


Asistimos a diario a la contemplación de tantas y diversas manifestaciones de odio que nos lleva  a preguntarnos ¿qué está pasando?, ¿por qué todo esto?, ¿es que el mundo se ha vuelto loco?. El odio es inherente a la condición humana porque sirve de estímulo en la lucha por la supervivencia y eso, que debería parecernos tan primitivo, lo tenemos puesto al día en pleno Siglo XXI y produce sonrojo pensar qué hemos hecho para llegar a estos extremos, porque todos hemos contribuido a crear la sociedad que tenemos.


Desde la más tierna infancia el odio forma parte de nuestras vidas. El niño ya en la guardería siente aversión y la manifiesta violentamente contra otro u otros niños; porque está gordo, porque lleva gafas, porque tiene un juguete que le gusta, etc. Luego en los niveles siguientes, la escuela o el instituto, el niño carga con toda crueldad contra quienes demuestran alguna debilidad,  sufren algún defecto físico o quedan rezagados  en el desarrollo de las actividades.



Estas manifestaciones de  odio que se generan en la infancia nos van a acompañar de una u otra manera a lo largo de nuestras vidas y solo la madurez, precedida por una buena educación y  sólida formación, puede contrarrestarlas con virtudes tales como la comprensión, el diálogo, la caridad y la solidaridad.


A lo largo de nuestras vidas asistimos a diario a bochornosos espectáculos de odio y violencia en el deporte, en la política, en la religión y en la sociedad en general.  Los recintos deportivos se han convertido en campos de batalla de forofos violentos de los equipos en lid y de otros que aprovechan la circunstancia para provocar la violencia por la violencia, sin más ideal o justificación. El suceso vergonzante ocurrido en Mallorca, donde un grupo de padres la ha emprendido a palos contra otro grupo por un incidente mínimo entre dos niños de equipos contrarios, es un claro ejemplo de que el odio ha invadido nuestras vidas y lo llevamos a flor de piel.



La política, considerada como una manera de ejercer el poder con la intención de resolver o minimizar el choque entre los intereses encontrados que se producen dentro de una sociedad,  es por definición el lugar del diálogo, de la reflexión y del entendimiento en aras a dar satisfacción a las necesidades de la sociedad.  Sin embargo vemos como cada día intereses personales y a veces espurios se anteponen al  bien general por rencillas históricas u odios de raíz ideológica. La carga de odio con la que actúa Podemos y los sectores más extremos de la izquierda española así como el nacionalismo, denotan que buena parte de nuestra clase política está invalidada para ejercer dignamente su función, aunque es cierto que se encuentra bien alimentada por una parte de la sociedad en la que el odio y el desprecio a lo ajeno son sus signos de identidad.



Las guerras de religión parecen  no acabarse nunca. Ya desde Turquía lo anunciaban días atrás. El enfrentamiento histórico de la cruz y la media luna debería haber terminado por la misma evolución de las sociedades cristiana y musulmana. No ha sido así porque el Islam mantiene  a sus seguidores en plena Edad Media y en ocasiones, la actitud y comportamiento de la colonizadora sociedad occidental cristiana en una sociedad feudal trasnochada  ha sido el detonante de una ola de violencia fomentada por el odio que unos cuantos iluminados han sido capaces de trasmitir a una  sociedad cerrada, sometida, poco formada y con un porvenir incierto en un mundo globalizado.


La actitud del  “Ayatolá” Iglesias  pregonando la “yijah” contra el cristianismo hispano no se entiende sino como el odio de un dictador comunista que pretende ,en su concepto totalitario de la sociedad, eliminar todo cuanto ideológicamente o de organización social pueda hacer sombra a su proyecto, sin percatarse de que otros antes que él ya lo intentaron hace ahora un siglo y en este país pocos años después, con el resultado que ahora puede comprobar en su lucha contra la misa del domingo en” La 2”. Pero aparte de este odio intrínseco que la extrema izquierda  profesa a los valores mundialmente reconocidos, religión, patria, justicia etc. en el caso de Podemos cabe pensar que es una  “yijah” impuesta por quienes alimentan sus arcas desde la teocracia iraní , a los que deben sumisión y respeto; no se entiende de otra forma que la segunda del “ayatolá” Iglesias aparezca en el Congreso con el velo musulmán y una pancarta invitando a permitir el velo y prohibir la misa.



En la sociedad progresista, moderna y egoísta, el odio es la manifestación más clara del individualismo llevado al límite, del desprecio por lo ajeno, de la envidia, de la negación del orden establecido, de la ruptura de las células básicas y tradicionales de nuestra sociedad. Se odia a España, al idioma,  a los símbolos, himno, bandera, monarquía, a la Constitución, a las fuerzas de orden público, al ejército, a todo aquello que consideran caduco y obsoleto un grupo de neofascistas, que suenan más que por lo que son,  por el ruido que hacen y por la cobertura mediática donde se genera la basura del todo vale. El odio se enseñorea de la sociedad, desde las familias hasta el Parlamento y si no encontramos el remedio, la vida en este país a la vuelta de unos años va a ser muy difícil; basta ver cómo crece el populismo y basta pensar cómo va a reaccionar el colectivo de inmigrantes una vez que las segundas y terceras generaciones asienten sus reales en esta vieja  piel de toro. Este es el periodo  más largo de la historia en que los españoles hemos pasado sin liarnos a mamporros entre nosotros. Da la impresión de que los echamos de menos. Dicen que los pueblos que no aprenden de su historia están condenados a repetirla. ¿lo dirían por nosotros?.

miércoles, 15 de marzo de 2017

NO HAY TIEMPO PARA ABURRIRSE


La pantomima les ha salido barata, de momento.


NO HAY TIEMPO PARA ABURRIRSE

Creíamos que una vez formado el Gobierno y dedicado cada uno a lo suyo íbamos a pasar de una situación de tensión y sobresaltos a otra de tranquilidad y sosiego rallando en el aburrimiento. En absoluto, el ruedo nacional está más que animado, los Tribunales de Justicia petados, los independentistas avisados, los podemitas ridiculizados, los del 3% dispuestos a cantar y ya en clave local, un escrache en el Pleno de Diputación y un celo excesivo en la Policía Local.

Los Tribunales no dan abasto, aunque sin generalizar, porque si bien los  catalanes están que arden con el 3% y sus derivados, los andaluces parecen haber caído en el letargo propiciatorio de las prescripciones y en la AN parece que se las cogen con papel de fumar (las sentencias) y tardan y tardan y tardan.

A los independentistas catalanes la “justicia catalana” les ha mandado un aviso a través de Mas y sus pupilas Irene Rigau y Joana Ortega. Un aviso pequeño, tímido, casi que de compromiso, “perro no come perro”. Ahora falta que la AN se decida a ver qué hace con el tal Homs, paladín arrogante y quijotesco de causas perdidas. De la AN depende que el aviso a navegantes “hispano huyentes” sea intimidatorio o una simple recomendación. Recomendación la que la fiscalía hace a los del 3% para que entonen el mea culpa suyo y ajeno a cambio de rebajas en “la Modelo”, que ya cierra. A Mas le pone de los nervios, más que los dos años de inhabilitación –ya estaba prácticamente inhabilitado por los suyos- el hecho de que alguien salga por “soleares” en los juicios actuales y pendientes y le retiren el título heredado de “Molt Honorable”.

La misa de La 2 triplica su audiencia ...

 Por Madrid los podemitas y sus secuaces emulan a Paco Martínez Soria en su actuación en “Don Erre que erre” y siguen en su empeño de atentar contra “el Régimen”, la tradición, la cultura, la religión y todo lo que lleve el apellido de español,  -no hispano, por no ofender- porque les suena a antiguo, a casta, a fascista. Pretende el enardecido Pablemos que se suprima la misa en La 2 cuando en ese canal la mañana de los domingos está reservada a espacios de diferentes confesiones religiosas en un claro propósito de establecer democracia, libertad e igualdad en un Estado aconfesional. La bofetada a Pablemos ha sido de órdago y el pasado domingo la misa en La 2 registró el mejor dato histórico  con  1.217.000 de espectadores y un 21,3% de cuota de share.

... gracias a san pablo Iglesias
 
Por otro lado Carmena avisa de que en 2025  -y lo controlará personalmente- solo circularán por el centro de Madrid los coches de caballos, cuyo excremento es ecológico y los gases expulsados por los equinos serán recogidos y tratados para no aumentar la contaminación. También va a ir de okupa en el Arco de la Victoria –vulgo Puerta de la Moncloa-, que pertenece a la Comunidad de Madrid, para instalar en él un centro de interpretación de las  345 checas madrileñas en las que fueron asesinados casi dos mil prisioneros, la cuarta parte clérigos y una exposición monográfica de las siete fosas de la  matanza de miles de presos en Paracuellos y de la gloriosa defensa de Madrid bajo la pancarta del “no pasarán”.

Centro de interpretación de Paracuellos
 
Volviendo al terruño, menuda la que se ha liado en el Pleno de la semana pasada en Diputación, donde un grupo de empleados de la misma han protestado por el incumplimiento  de un sospechoso asunto de prebendas y gabelas en forma de productividad. Claro que, no hubiera pasado nada si las protestas e insultos hubieran ido encaminados contra los políticos del PP, pero no, en este caso fueron contra la portavoz de Ganemos y eso es execrable, condenable, antidemocrático y un largo etc. No parece ser que a la izquierda le siente bien lo que aconsejan para la derecha pero de cuando en cuando el escrache se convierte en búmeran  y vuelve a quien lo promocionó y, aún llevando razón en este caso la portavoz de Ganemos, no viene mal que de cuando en cuando prueben sus misma medicina.

 
Los funcionarios toman la Diputación
 En cuestiones de seguidismo de las campañas de Tráfico se suele decir que cuando en Madrid estornudan en Albacete se constipan y eso les pudo pasar el lunes a las once de la noche a un grupo de agentes de la Policía Local a los que se había ordenado establecer un control de cinturón de seguridad. Los controles de velocidad o de consumo de alcohol y drogas son efectivos por ser disuasorios pero pierden su efectividad si no se tiene en cuenta el principio de  oportunidad. Un control de alcohol un martes a las doce de la mañana en los invasores, por ejemplo, pierde toda la efectividad porque no es oportuno. Por la misma razón, un control de cinturón de seguridad, por mucha campaña que impongan desde la DGT, el lunes a las once de la noche en la Posada del Rosario, con un frío polar y lloviendo a cántaros, no creo que el problema mayor de la Policía Local fuera saber si los pocos conductores que circulaban a esa hora llevaban puesto el cinturón. En cambo sí es posible que fueran necesarios en determinadas zonas de la ciudad donde las inundaciones han obligado incluso a la evacuación de vecinos. Alabo su profesionalidad y confieso que me molestó ver cómo estaban aguantando el chaparrón, empapados hasta los ojos por una causa de mínima importancia en esos momentos. Desde luego, quién programase esa actividad debe cuidar muy poco de los que de él dependen o debe preocuparle más el poner cuatro multas que estar preparado para las incidencias del enorme aguacero que duró todo el día.

De Pedro I “el guapo” –ya no digo el breve por si las moscas- y del ratón de Susanita ya trataré otro día. Van a dar mucho juego en estos dos meses.


miércoles, 8 de marzo de 2017

LA YIHAD DE LA IZQUIERDA CAVERNÍCOLA




LA YIHAD DE LA IZQUIERDA CAVERNÍCOLA

“Arderéis como en el 36”. La izquierda más extrema vuelve a la carga y, como siempre, centrando sus odios en la comunidad cristiana, mayoría indiscutible en la sociedad española, bien por lo fácil que resulta hacer burla de sus signos, sus símbolos y sus celebraciones, como por lo barato que sale hacerlo, ya que la Justicia mira hacia otro lado y los cristianos siguen siendo fieles a la doctrina de poner la otra mejilla. Es curioso que toda esta chusma que este año ha vuelto a las andadas en los carnavales canarios, no tengan el arrojo de criticar o hacer mofa de la comunidad islámica y de sus símbolos o textos sagrados. La diferencia es que ir contra el Islam suele costar el cuello mientras que contra los cristianos no solo no hay venganza sino que además la justicia se pone vergonzosamente de perfil.

Frente al odio de la minoría radical, antisistema, comunista,  populista y demás familia, la mayoría de la sociedad valora la labor de la Iglesia Católica y así lo demuestra el aumento en 55.841 de declaraciones en las que se marca la X a favor de la Iglesia en 2016, ascendiendo a un total de 7.347.612 declaraciones con asignación a la Iglesia, que corresponden según estimación a un colectivo de 9 millones de contribuyentes. El porcentaje de declaraciones a favor de la Iglesia suponen ya el 34,93 y en los diez años transcurridos desde el comienzo del sistema de asignación tributaria, las declaraciones con la Iglesia como beneficiaria han aumentado en 864.000.


 Hace poco más de un año escribía en mi blog esto que transcribo, que no ha perdido un ápice de actualidad y que se centra en la fobia de la extrema izquierda representada por Iglesias y Garzón contra todo lo que se oponga, limite o desautorice su concepto totalitario del gobierno del pueblo, bien sea religión, prensa o cualquier otro poder fáctico:

“A diferencia de sus abuelos de la República, los podemitas con el apoyo de IU y el resto de la extrema izquierda han optado por no quemar conventos ni  imágenes y han elaborado un plan diabólico, que puede confundir a mucha gente y cuyo fin último es borrar de la sociedad cualquier huella de las creencias y costumbres religiosas tradicionales.

La extrema izquierda  podemita y sus compañeros de viaje  solo aceptan el poder emanado de su propia doctrina totalitaria. No quieren a su lado ningún poder fáctico que pueda distorsionar sus planes, por eso la Iglesia siempre ha sido el enemigo a batir, por la convicción de sus miembros y por la estructura monolítica y  jerárquica de la misma. Los podemitas se han lanzado a  destruir  los sentimientos y manipular las conciencias hasta conseguir un modelo de sociedad espiritualmente vacía que la convierta en sumisa y  manejable.

La Iglesia actual, la de los pobres, la de Cáritas y un montón de ONG, la  de los comedores sociales, la de los hospitales en zonas de alto riesgo, la que vive pensando en el tercer mundo que la sociedad occidental ayudó a crear, esa Iglesia entra en contradicción con la demagogia de la sociedad podemita, criada entre sedas, alimentada con manjares y formada en la universidad y que utiliza a los pobres como materia prima para sus experimentos populistas y totalitarios.

 “Con la Iglesia hemos topado, amigo Sancho”, decía Don Quijote. ¿De qué vais pobres mortales que de paso estáis?, digo yo. Desde Nerón hasta Diocleciano pasando por emperadores  nacidos en estas tierras como Trajano y en menor grado Adriano, la persecución de los cristianos fue sistemática,  hasta que el mismo imperio sucumbió ante ellos de manos de Constantino. La revolución francesa volvió a intentarlo sin éxito. El comunismo de principios del pasado siglo volvió a la carga, prohibió las religiones,  destruyó templos y masacró a los creyentes; sus correligionarios en España hicieron igual en la tercera década del  mismo y más recientemente los fundamentalistas musulmanes anclados en la Edad media regresan a la guerra santa contra los infieles cristianos; pero como escribía el apologista romano Tertuliano en su obra “Apología”: "Nos hacemos más numerosos, cuando nos segáis: la sangre es semilla de cristianos".

“… Y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella”. Si no pudo Diocleciano en el S IV ni Stalin en el S XX, no vais a poder vosotros, secta de deshechos. “


El artículo 16 de la Constitución garantiza la libertad ideológica, religiosa  y de culto de los individuos y el Código Penal en su artículos 524 y 525  castiga con penas de multa la profanación: «que en templo, lugar destinado al culto o en ceremonias religiosas, ejecutare actos de profanación en ofensa de los sentimientos religiosos legalmente tutelados». O  “"para ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa hagan públicamente escarnio de sus dogmas, creencias, ritos o ceremonias, o vejen  a quienes los profesen o practiquen".

No parece que a los gobernantes y a los jueces preocupe demasiado esta moda implantada por la extrema izquierda que se pasa por el arco del triunfo los derechos humanos y ante esa actitud, no sé hasta qué punto los cristianos debemos seguir ofreciendo la otra mejilla o por el contrario debemos tomar cartas en el asunto y defender por nuestra cuenta aquello que el Estado pregona pero no cumple.